La habitación era nueva y climatizada, contaba con un aire acondicionado excelente y aire acondicionado y también instalaciones para hacer café.

Guau! Qué experiencia más alucinante tuvimos en este hotel. La tranquilidad absoluta de la zona nos dejó sin palabras, ¡era como estar en otro mundo! Además, por las noches, el cielo estrellado era simplemente impresionante. Las habitaciones, aunque con una decoración anticuada, eran súper cómodas y acogedoras. El restaurante era espectacular, con un menú degustación que ofrecía una representación de la cocina francesa, y el filete de venado era para chuparse los dedos. Además, los vinos de la zona eran increíbles. El trato del personal fue impecable, hablaban perfectamente español y nos atendieron de manera muy amable y atenta. La cama era comodísima y pudimos descansar como nunca. El hotel estaba muy cuidado y limpio, y los dueños eran súper amables y siempre dispuestos a ayudar en lo que fuera necesario. Aunque estaba alejado de los pueblos, con el coche no tardábamos nada en llegar y pudimos visitar los alrededores y disfrutar del canal du midi en menos de media hora. En resumen, una experiencia súper positiva en un hotel familiar donde nos sentimos como en casa.

Buena relación calidad precio y habitaciones confortables, con una ubicación tranquila que permite el descanso y disfrutar de un bonito paisaje, situado anexo a un chateaux. El Servicio y la atención al cliente muy buena.

No, pero solo estuvimos una noche.

El servicio es muy atento. Tienes parking gratuito. Las habitaciones son amplias y cómodas. Cama grande y cómoda. Baño nuevo, me encantó la bañera. Situación del hotel, zona tranquila, rural.

Desayuno aunque bueno, caro. Almohadas cuadradas, pequeñas y no muy cómodas.

Cada rincón está diseñado para hacerte sentir como en casa.

Apto solo para escapadas tranquilas.

Profesionalidad y atención del propietario y el personal. Restaurante "gourmet" en la instalación. Situación y entorno para conocer la zona de Minerbes (fr.: Minervois) y en el centro para visitas a Narbonne, Carcassonne, Bèziers, la Montaña Negra y les Espinouses... y en mi caso personal -persona con discapacidad física y movimiento en silla de ruedas- una correcta adaptación de la accesibilidad de las instalaciones y los servicios.

el entorno

Que no estuviera incluído el desayuno en el precio y localización lejana del centro urbano

Me encantó la tranquilidad de la zona y las noches estrelladas. Las habitaciones sencillas pero cómodas y limpias. El restaurante ofrece un delicioso menú degustación con platos representativos de la cocina francesa. Los vinos locales son excelentes. El trato del personal fue impecable, amables y disponibles. La cama era muy cómoda.

Me sentí como si estuviera con mi familia, no tengo ninguna queja en absoluto.

unas vacaciones relajadas en Bize-Minervois superaron nuestras expectativas, especialmente en La Bastide Cabezac. El hotel es familiar, limpio y los dueños son amables. El restaurante ofrece un espectacular menú degustación de cocina francesa por 42€. La ubicación tranquila permite disfrutar del cielo estrellado, y en coche se llega rápidamente a los pueblos cercanos y a Narbona en menos de media hora.

falta de opciones para comer en los alrededores. muchos negocios, incluyendo restaurantes, están cerrados en invierno, lo cual dificulta encontrar lugares donde comer o cenar fuera del hotel.

una ubicación cómoda para explorar bize-minervois y un servicio muy bueno. las habitaciones son prácticas, con un buen diseño y nuevas, con facilidades para hacer café, café y también un aire acondicionado excelente.

Este lugar es increíble con un personal amable, la habitación doble es grande y cuenta con té, aire acondicionado y facilidades para café, ¡me encantó todo, lo recomiendo!

Hotel familiar y limpio. Dueños amables y disponibles. Restaurante espectacular. Cerca de pueblos y canal du midi. Buena experiencia.

Nada que me haya disgustado.

Este lugar está cerca de los bancos y viñedos, y las habitaciones tienen una decoración moderna muy bonita.

Las habitaciones tenían un aspecto moderno con un aire acondicionado genial y también disponían de amenidades para preparar té y café; los servicios ofrecidos eran de alta calidad.

Hotel muy cuidado y limpio. Los dueños son amables y disponibles. Restaurante espectacular! Cerca de tiendas y bares. Experiencia positiva. Tranquilidad absoluta y cielo estrellado por la noche. Habitaciones sencillas pero cómodas. Personal impecable, hablan español y son amables y atentos. La cama era comodísima.

Recomiendo este hotel.